Pahanhautoja nos muestra la imagen de una familia modelo, donde cada miembro mantiene siempre una convivencia de armonía y respeto, y donde cada uno de ellos cumple sus sueños y sus metas. Tanta perfección nos hace algo de ruido, y mucho más cuando una familia de estas características está involucrada en un film de terror. Esta película es una sátira que muestra cómo, fuera de las cámaras, todo se derrumba sin que nadie haga nada para detenerlo. Es solamente el comportamiento natural que va evolucionando.
La historia nos presenta a una mujer obsesionada con mostrar a su familia perfecta, en especial, a su hija, a quien obliga a entrenarse sin parar con el anhelo de que sea la mejor, y satisfacer así sus propias obsesiones. Por otro lado, tenemos a su esposo (un hombre rebajado a la nada misma, que no logra comprender a sus hijos, y mucho menos despertar el deseo de su esposa) y a su hijo (un niño que pasa la mayor parte del tiempo ignorado). Pero todo cambiará después de un incidente: la hija halla un huevo, que decide cuidar. Con el pasar de los días, el huevo irá aumentando de tamaño, hasta que nace una criatura. Desde este momento, surgirá una relación que mezcla la maravilla y la fatalidad entre la pequeña y la criatura recién nacida.
En el film se evidencia una dosis de body horror bastante efectivo, así como también discreto, ya que la película no se basa en mostrarnos un catálogo de viscosidades. Aquí la transformación evoluciona al mismo ritmo que la historia, hasta obsequiarnos un final que a la vez sirve como paralelismo y como metáfora. Si bien estas escenas quedan expuestas al público, uno puede construir la siguiente, sin la necesidad de que el metraje continúe.
El film no decae en ningún momento; el director sabe cómo llevar cada una de las escenas, en especial cuando se habla de sentimientos maternos. Aquí también vemos un paralelismo entre los dos casos que se presentan: sumisión y responsabilidad hablan por sí solas.
Pahanhautoja es una grata sorpresa para este año, en que varias producciones que prometían traer algo fresco al género terminaron por decepcionar. No quiero indagar mucho en la trama para que ustedes puedan ir descubriendo la historia. Solo me resta decirles una cosa: cuidado con los huevos que vayan encontrando en su camino.